Y así los ents marcharon a la guerra, a Isengard - Parte II

Bueno, aquí está la segunda parte de este artículo, que trata sobre la contradicción de ser un país descolonizado y colonizador a la vez.

No soy muy partícipe de categorizar las cosas como "bueno o malo", pero es posible que en realidad sea este un buen punto de partida para meditar sobre nuestras acciones. En "Ética para Amador", Fernando Savater define el mal por "todo aquello que nos hace daño", donde concluye que uno no puede vivir sin conocer y diferenciar el bien y el mal y que esta capacidad es algo imprescindible.

No es que el desarrollo económico per se sea lo que nos hace daño, como sugieren algunos ambientalistas y ecologistas; existen numerosas opiniones de mucho peso que el desarrollo económico es la mejor y más rápida salida de la pobreza. Lo que está mal entonces es disfrazar, so pretexto de desarrollo, intereses económicos de los autodenominados "pluriculturales" (colonizadores), que son sin duda la base política más fuerte del presidente Evo Morales, con la posible construcción de la carretera que atravesará el TIPNIS. Se calcula que los colonizadores sobrepasan el millón de personas, lo que representa obviamente un porcentaje importante de votos. Si cabe alguna duda sobre esto, es fácil ver que esta no es la única ocasión que el presidente Morales busca favorecer en exceso a sus bases políticas; justamente ayer anunció que los grupos mineros afines al proceso de cambio estarán exentos de pagar impuestos. ¿Y para qué requieren los colonizadores el TIPNIS? Para crear asentamientos y dedicarse a la agricultura de diversos productos que ellos producen.

Otra argumentación válida es aquella que Andrés Oppenheimer ha repetido durante algunos años ya, que dice que la mejor forma de vencer a la pobreza es mediante la educación en las áreas de ciencias puras, dado que en la era del conocimiento, este es el que produce mayor valor agregado. ¿Y las carreteras? Pues, la vertebración de un país es importante, pero ya no bajo el concepto antiguo de fomentar el crecimiento de la industria en áreas alejadas (como fue el caso de Santa Cruz), sino bajo el concepto de mejorar la competitividad de un país para reducir los costos de exportación. Con este análisis, dadas las condiciones de infraestructura caminera y portuaria del oriente del país, se hace muy difícil justificar la necesidad de construir esta carretera, dada la existencia de numerosos puertos que conectan por distintos ríos el océano atlántico desde otras partes del oriente.

En la historia del Señor de los Anillos el bien prevalece al final. Sin embargo, cuando comentaba acerca de la realidad, el propio Tolkien reconoce que "los grandes absorben a los pequeños y todo el mundo se vuelve más plano y aburrido".

¿A qué conclusión llego? Como se desenvuelven los acontecimientos, al igual que los ents marcharon a la guerra, también lo hicieron los indígenas del TIPNIS; la diferencia es que los indígenas no sabían que se encaminaban a una verdadera guerra, donde confluirían sus intentos por preservar sus territorios y tradiciones intactos frente a los intereses de poder y riqueza de Evo Morales y sus bases, que cegados de poder, alientan el conflicto y la violencia innecesaria.

Las consecuencias son muy previsibles a estas alturas, con los colonizadores corrompidos y ávidos de poder dispuestos a marchar hacia el conflicto como obedientes ovejas y los indígenas luchando por sus derechos, no hay salida pacífica posible si se encuentren las huestes del gobierno con los indígenas, lo cual ocurrirá más pronto que tarde. ¿A quién recurrimos cuando el presidente se ha comprometido de lleno a obrar "el mal", cuando el país confiado le permitió acabar con la institucionalidad cuya misión era de proteger al país del abuso de poder y cuando las fuerzas del orden no se encuentran totalmente comprometidas a cumplir con su deber?

Hay quienes desean la carretera porque para ellos significa avance y desarrollo para el país, pues a final de cuentas, este pensamiento se enseña en los colegios bolivianos desde siempre. Incluso si esto fuera cierto, la pregunta que debemos hacernos a largo plazo es: ¿vale la pena vertebrar el país con carreteras y traer desarrollo cuando esto significa destruir culturas antiguas indígenas y forzarlas a adaptarse y entrar al siglo XXI? El mundo occidental moderno es muy diferente al mundo que los indígenas conciben y creen, un mundo mágico lleno de dioses que hacen que llueva, que haya buena salud, etc. Yo creo que si la respuesta es positiva, puedo afirmar que no somos mejores que los odiados colonizadores españoles, pues sin darnos cuenta, nos habremos convertido en ellos, lo que termina siendo una contradicción de fondo con el ideal del estado plurinacional de ser un estado "descolonizado".

En la misma línea, algún amigo me dijo que no valía la pena que Bolivia se dedicara a cuidar el medio ambiente cuando nadie más la hacía. En cierto modo, tiene razón, pero parte de nuestro devenir siempre debería ser tratar de actuar con la conciencia primero, antes que con la razón, lo que implica que el cambio verdadero debe provenir primero de nosotros mismos.

Cierro con lo último que dijo Gandalf (el mago que hace las veces de profeta) en el Señor de los Anillos: "Otros males podrán sobrevenir, porque el mismo Sauron no es sino un siervo o un emisario. Pero no nos toca dominar todas las mareas del mundo, nuestra tarea es la de hacer lo posible por la salvación de los años en los que vivimos, erradicando el mal de los campos que conocemos, para dejar a los que vendrán después tierra sana y limpia para cultivar. Pero el tiempo que tendrán no depende de nosotros".

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Y así los ents marcharon a la guerra, a Isengard - Parte I

Divido este artículo en dos pues me quedó bárbaramente largo, y creo que tiene muchas cosas como para pensarlas por partes. Aquí va la primera parte, que habla de los malos de la película: hay malos y malotes... y esos malotes son parecidos a los de los cuentos.

Las cosas en Bolivia otra vez pintan negras. Veamos, el plato principal de este mes será "guiso de conflictos sociales". Los ingredientes son: los indígenas retomarán la marcha por el TIPNIS hacia la ciudad de La Paz. Los colonizadores y otros afines del MAS iniciarán la contramarcha en defensa de la carretera y el proceso de cambio, con el apoyo tácito del presidente Evo Morales y su gobierno, que se niegan a ceder. El ejército no se halla muy fiel al Presidente y al gobierno luego de que generales fueran condenados a 15 años de cárcel por acatar órdenes directas del ex Presidente Gonzalo Sánchez de Lozada; ¿quién les asegura que el bando ganador no se encargará de enjuiciarlos de nuevo por cumplir con su trabajo? La policía se encuentra en un predicamento similar, pues el gobierno anunció juicios de responsabilidad contra los responsables de la represión policial en Yucumo. Encima de eso, los dejaron allí, no los recogieron, con apenas 40 bolivianos, que fueron sus viáticos por ir de viaje. No me extraña que "aparecieran" en la zona de conflicto los documentos con las firmas de aquellos que dieron las órdenes de apresar y golpear a los indígenas.

Todo este conflicto tiene una solución sencilla: que Evo Morales haga la consulta de conformidad con la carretera del TIPNIS en el TIPNIS, como manda la ley. Mientras insista en una consulta regional, nacional, sectorial u otro que no esté de acuerdo a la Constitución Política, el conflicto no cesará. ¿Y la oposición? Pues la tiene clara. Al ser una de las pocas organizaciones no oficialistas que quedan y con capacidad de convocatoria, se mantendrán fieles a los indígenas. En algunos casos (como la derecha tradicional), será hasta que retornen al gobierno. En otros (como el MSM), no se sabe qué sucederá luego. En ambos casos no obstante, el TIPNIS es la chispa que necesitaban para volver a existir a nivel nacional

Ante todo, la pregunta de fondo debería ser: ¿Evo Morales hace bien o mal al tratar de forzar la construcción de la carretera? Para responder a una pregunta tan compleja, es necesario definir algunos conceptos clave. Estos son ¿qué es el mal?, ¿dónde se origina el mal? Claro que no responderé a estas preguntas a profundidad, pues requieren de verdadera sabiduría. Entonces, invocaré a dos grandes escritores, para que traten de iluminarme en este artículo. El primero es el gran filósofo español Fernando Savater y el segundo es mi escritor favorito, J.R.R. Tolkien.

Estoy seguro que la mayoría de las personas conocen (al menos de oídas) el Señor de los Anillos. Esta obra, escrita por el célebre escritor Tolkien, relata los eventos de una tierra fantástica poblada por seres míticos, cuyas vidas y tradiciones se hallan peligradas por un inminente cambio de era, representado por la famosa guerra entre el bien y el mal. Esto es al menos lo que en principio es la trilogía del Señor de los Anillos, cuando no se llega a profundizar un poco más sobre el tema y la vida de Tolkien.

Lo que se puede decir en resumen de esta obra es que es un intento de Tolkien de salvar la mitología anglosajona de la desaparición haciendo un riguroso estudio y recopilación de esta. Incluso se cree que Tokien estudió antiguos dialectos presentes hoy en alejadas y aisladas zonas de Europa, con lo que da vida a su obra. Esta mitología le permite realizar un primer propósito, que era el de fabricar una mitología anglosajona propia de Inglaterra, la cual se perdió en el transcurso del tiempo debido a numerosas invasiones de diversas civilizaciones al territorio inglés. El segundo propósito es, por muy extraño que suene, propagar el Evangelio.

Tolkien hace una dura crítica a la modernidad mientras trata de explicar el origen del mal. De hecho en una de sus cartas, Tolkien dice temer "el avance destructor de la modernidad tecnológica e irreligiosa, la desaparición de la memoria, de la Tradición y la llegada de tiempos de aridez, de materialismo, de mentira". Tolkien señala repetidas veces que el origen del mal es el poder. Es así que el Señor de los Anillos comienza con la leyenda de cómo los anillos (de ahí el nombre) fueron forjados por Sauron como regalo a los líderes de todas las razas del mundo. Estos anillos mágicos tenían la capacidad de otorgar poderes únicos a cada líder. Gracias a estos anillos, Sauron corrompe a la mayor parte de estos líderes, pues al otorgarles poder, los somete a su voluntad.

Pues bien, retomando el TIPNIS, mientras leía esta mañana el resumen de las barbaridades que se gestaron este fin de semana, se me vino a la mente el momento en que los valerosos hobbits Peregrin Tuk y Meriadoc Brandigamo logran convencer a Bárbol, protector del bosque de los ents, de atacar Isengard, mostrándole cómo es que el mago Saruman, quien regía Isengard, había depredado y asesinado a muchos amigos árboles de Bárbol, con tal de hacer carbón con ellos.

Es evidente que el carbón hace referencia al desarrollo de la modernidad que tanto teme Tolkien, pues es así como el mago movía sus fábricas de guerra para crear armas y otras atrocidades. Una vez que Sauron corrompe a Saruman, este comienza a modernizar su ciudad a costa del bosque vecino de los ents. Me animo a decir que al igual que los ents se levantaron para defender sus territorios y su forma de vida, también lo hicieron los indígenas del TIPNIS. Hallo aquí algunas similitudes entre Evo Morales y el mago Saruman, que me gustaría compartir:

- Así como el malvado mago Saruman, Evo Morales necesita la famosa carretera para alcanzar el tan preciado desarrollo del que tanto habla.
- Imitando un poco al mago Saruman, Evo Morales también alentó a sus huestes a salir a luchar para defender el desarrollo, las cuales se hallan en preparativos para realizar las numerosas contramarchas que se harán a lo largo de este mes.
- También el mago Saruman se hizo amigo de los ents y les prometió cuidar su bosque con su magia. En el caso Evo Morales, él les dio autonomía absoluta sobre sus territorios a los indígenas por medio de la Consitución Política que hizo aprobar hace algunos años.

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La evacuación de emergencia

Hola a todos los que leen mi blog. Estas últimas dos semanas han sido horribles y frustrantes, tanto en Bolivia como en el mundo, motivo por el cual no tuve ganas de escribir nada en el blog.

Primera frustración: Estados Unidos e Israel hicieron uso de la retórica más repugnante para negar la posibilidad de existencia del estado Palestino. Nota aparte lo que ocurre en medio de la ocupación israelí de Palestina o los motivos que llevan a este país a tomar acción militar, lo cierto es que Palestina tiene derecho a existir como estado independiente, igual que Israel a finales de los años cuarenta. Por este lado, Obama mostró que es capaz de pasarse su discurso de los últimos 3 años de apoyar la creación del estado palestino por el c... con tal de contar con el voto judío en las elecciones del 2012.

Segunda frustración: El poderoso lobby republicano norteamericano está dispuesto a mandar al mundo a una segunda recesión con tal de ganar las elecciones del 2012, bloqueando cualquier intento de la administración de Obama de fomentar el consumo en dicho país. Si de verdad llega la recesión, como predican los mejores economistas del mundo, acá en Bolivia nos fregamos.

Tema relacionado, en la Euro Zona, decida lo que decida Alemania esta semana, todos los miembros pagarán la factura.

Tercera frustración: Los eventos de ayer en el TIPNIS no tienen nombre. Algunas cosas que hay que recalcar.
1. Policías rodearon y apresaron salvajemente a los indígenas y sus dirigentes de la marcha, atándolos, amordazándolos y tapándoles las cabezas mientras los subían a buses. Algunos fueron golpeados, mientras otros huían aterrorizados al monte para esconderse de la represión. Posteriormente, se separó a las mujeres de sus niños y se los llevó por separado.
2. Se confiscaron cámaras y expulsaron a periodistas para evitar que hubieran testigos.
3. El mismo trato que se dio a los dirigentes indígenas recibieron los médicos que estaban en la zona tratando de ayudar a los heridos; se los maniató, amordazó y tapó sus cabezas para apresarlos, además que los patearon y golpearon como "yapa".
4. Llorenti se rió de los periodistas, que indignados, pidieron conocer el nombre de la persona que dio la orden de actuar con la fuerza pública. Luego respondió que fue un requerimiento fiscal para evitar el enfrentamiento entre civiles, siendo esta acción una evacuación de emergencia. Mientras, los pies de pantalla de canal 7 rezaban "MARCHISTAS AGREDEN A LA POLICIA" y "NO HAY DESPARECIDOS NI MUERTOS".
La excusa a priori de Romero es que los indígenas secuestraron al canciller Choquehuanca y que los indígenas esperaban a Evo para secuestrarlo. El supuesto secuestro ocurrió cuando las mujeres obligaron a marchar al canciller con ellos cuando este les dijo que "no había bloqueo ni cordón policial".
Además Llorenti admitió que si la policía violó los DDHH o cometió abusos, serán procesados. Digo yo, encima que los obligan a cumplir órdenes, los enjuician. Ojalá el Estado no se quede sin fuerzas de orden leales.
5. Evo Morales se pasó por el c... toda ley posible al anunciar un referéndum en Beni y Cochabamba, cuando la ley dice claramente que los indígenas del TIPNIS son autónomos y tienen derecho a decidir si dicha carretera pasa por su territorio o no.

Me da asco la actitud del ministro Llorenti; creo que al menos debería tener el valor de dar la cara y no echar la culpa a otros.

Un buen ejemplo es el que dio la ministra de defensa Chacón, que renunció hoy por la mañana, mostrando algo de decencia y coraje, ¡bien por ella! La renuncia (a la izquierda) dice que su decisión se debe a que no está de acuerdo con la postura del gobierno, la cual no puede defender ni justificar. Bueno, al menos me queda claro que la represión no fue un "requerimiento fiscal", sino una orden de arriba.

Mientras las masas corean "Evo asesino" o "Evo maldito, vas a caer. Linera maraco, vas a caer", con masivas movilizaciones en el país, es momento de considerar ¿hacia dónde vamos? Yo me animo a adelantar que esto podría ser la demostración de que Boliviase dirige a ser una dictadura moderna, donde las representaciones de disentimiento son cruelmente reprimidas. Espero que no debamos lamentar un mayor número de víctimas producto del mal manejo de conflictos del gobierno.